TRAUMA DE CUELLO

OCCIPITAL

Nace de la cara posterior de la carótida a la altura de la facial, se dirige hacia atrás y arriba, cruza la yugular interna, sigue por dentro del vientre posterior del digástrico, cambia de dirección volviéndose transversal caminando sobre el oblicuo superior y el complejo mayor estando cubierta por el esplenio; cerca de la protuberancia occipital externa perfora el trapecio y el cuero cabelludo y se divide en dos ramos: uno anterior que se anastomosa con la auricular y otro superior que termina en la parte media del cuero cabelludo.

AURICULAR POSTERIOR

Nace un poco por encima de la occipital, se dirige arriba y atrás cubierta por el digástrico y la parótida que luego abandona para colocarse en el surco auriculomastoideo sobre la cara superficial del Esternocleidomastoideo y se divide terminalmente en dos ramas: una anterior que se distribuyen el pabellón de la oreja y otra posterior que se anastomosa en la región mastoidea con las arterias vecinas.

FARÍNGEA INFERIOR

Es las más pequeña de las ramas de la carótida; se desprende de su cara interna y asciende a lo largo de la faringe irrigando los constrictores; termina con el nombre de meníngea posterior penetrando en el cráneo por el agujero rasgado posterior.

CARÓTIDA INTERNA

Nacida de la bifurcación de la primitiva asciende en el cuello profundamente en compañía de la vena yugular interna y del neumogástrico, hasta el agujero carotídeo; recorre el canal carotídeo y ya en el interior del cráneo suministra la oftálmica y termina por cuatro ramas. En el cuello la carótida interna no da ninguna rama lateral.

VENAS

La sangre venosa de la cabeza y del cuello regresa al corazón por diversos sistemas tributarios de la vena cava superior y por algunas venas independientes. Los sistemas yugulares son cuatro: anterior, externo, interno y posterior.

YUGULAR ANTERIOR

Toma origen por venas submentonianas que se reúnen para formar una que sigue hacia abajo por el tejido subcutáneo, cerca de la línea media y anastomosándose a veces con la del lado opuesto, al llegar al espacio supraesternal perfora la aponeurosis cervical; se dirige hacia fuera por la cara profunda del Esternocleidomastoideo y termina en la subclavia o en la yugular externa.

YUGULAR EXTERNA

Su origen es variable, unas veces nace de la reunión de la vena temporal superficial con la maxilar interna a la altura del cuello del cóndilo del maxilar inferior y otra de la reunión de la temporal superficial con una vena facial posterior en el interior de la parótida cerca del ángulo del maxilar inferior; el tronco de la yugular externa perfora la aponeurosis cervical por delante del Esternocleidomastoideo, se dirige abajo y atrás cruzando la cara externa del músculo, llega al triángulo supraclavicular y termina en la vena subclavia.

YUGULAR INTERNA

Comienza por una dilatación, el golfo, por debajo del agujero rasgado posterior donde continúa al seno lateral; se dirige hacia abajo por el espacio maxilofaríngeo acompañado primero a la carótida interna y luego a la primitiva por fuera de las cuales está situada; en la base del cuello se une a la subclavia para formar el tronco venoso braquiocefálico correspondiente. En el cuello recibe como afluentes las venas facial, lingual, tiroidea superior, tiroidea media y faríngea interna.

YUGULAR POSTERIOR

Nace en el plexo occipitoatolideo confundiendo su origen con el de la vena vertebral; se dirige hacia abajo entre el complexo mayor y el transversario espinoso y al llegar a la 7 cervical se dirige adelante y termina en el tronco venoso braquiocefálico después de haber recogido la sangre venosa de los planos profundos de la nuca.

LINFÁTICOS

Los ganglios son numerosos y se distribuyen en varios grupos; en el límite superior del cuello se encuentran los siguientes grupos:

1. Occipital: formado por 3 o 4 ganglios situados en la protuberancia occipital externa que reciben linfáticos del cuero cabelludo.
2. Mastoideo: 2 o 3 en la cara externa de la apófisis mastoidea que también reciben linfáticos del cuero cabelludo.
3. Preauricular o Parotídeo: 3 o 4 que reciben linfáticos de la frente y parte externa de los párpados.
4. Submaxilar: 6 o 7 ganglios situados a lo largo del borde inferior y reciben linfáticos de la mejilla; la nariz, los labios y la parte anterior de la lengua.
5. Suprahioideo: 2 0 3 que reciben linfáticos del piso de la boca, de la lengua, de la encía.
6. Retrofaríngeo: situado por delante de las masas laterales del atlas, recibe linfáticos de la faringe y de las fosas nasales.

De todos estos grupos salen colectores que terminan en los ganglios carotídeos, de 20 a 30, escalonados desde el tendón intermediario del omohioideo hasta el digástrico a lo largo del paquete vasculonervioso del cuello. Los vasos eferentes de los ganglios carotídeos terminan a la derecha en la gran vena linfática y a la izquierda en el canal torácico.

ZONAS DEL CUELLO

Tradicionalmente el cuello se ha dividido en triángulos según las zonas anatómicas, así:

• ZONA I: se extiende desde el borde superior de las clavículas, hasta el borde inferior del cartílago cricoides. El control proximal de los grandes vasos contenidos en esta área generalmente requiere toracotomía.
• ZONA II: va desde el borde inferior del cartílago cricoides hasta el ángulo de la mandíbula. Las lesiones en esta área son las de más fácil exposición y acceso.
• ZONA III: se extiende del ángulo de la mandíbula hasta la base del cráneo. El acceso a las lesiones en esta área es difícil y generalmente requiere desarticulación de la mandíbula.

La zonificación de las heridas no es lo más importante; sí lo es poseer un buen conocimiento anatómico del cuello y tratar de establecer la trayectoria de la herida. La decisión quirúrgica se fundamenta en la demostración de compromiso de órganos vitales o de una sospecha fundamentada de que están afectados.

Las heridas penetrantes de cuello pueden involucrar: la vía aérea (tráquea y laringe); el tracto digestivo superior (hipofaringe y esófago cervical); el sistema vascular (arterias carótidas, subclavia y vertebral, o venas yugulares); los órganos (tiroides, paratiroides, glándulas salivares); sistema óseo (vértebras, base del cráneo, clavícula, mango esternal, mandíbula); y el sistema nervioso (médula espinal, plejo braquial).